27 de julio de 2007

Tierras baldías.

Le miré a los ojos, la pupila negra y brillante como la obsidiana, el iris manchado de lágrimas, poco a poco me atrapó con su mirada y pude comprender… Los recuerdos caían como rocas, aprisionando cada vez más su alma, cada una con su historia, unas más grandes, otras más pequeñas, todas ellas se amontonaban formando una pirámide cada vez más pesada, con cada segundo otra roca, y otra, y otra… Te quiero… Repítelo… Silencio… Un sueño, de apariencia robusta, se deshizo en mil pedazos salpicando con angustia en todo su ser. Poco a poco el esplendor se deshizo en oscuridad, amontonado bajo historias trágicamente dulces y amargamente añoradas. Como el tiempo, las rocas caían impasibles, pronto no quedó nada en pié, todo deshecho en un desierto de recuerdos borrosos como figuras en la arena, fugaces y temporales.

Me quería decir todo, sin embargo no podía decir nada, se encontraba hundido, agonizando entre falsas ilusiones, tendiéndome una mano con la esperanza de ser salvado, con el deseo de que el tiempo se detuviese y con ello cesara esa horrible destrucción. Le di la espalda y marché.

Llevo tiempo sin escribir nada, siento la falta de actualizaciones. Entre exámenes y otras cosas tiempo es precisamente lo que me falta. Salvo raras apariciones seguiré así por un tiempo. He desatendido demasiado mi hogar y está prácticamente deshecho, por lo que he decidido tomarme un tiempo para meditar o acabaré con una crisis o algo por el estilo xD

Saluditos a los pocos que sigan leyendo.

Tiki y David, les debo una llamada.