25 de mayo de 2009

Solo eras.

Entre hilachos de humo solo eras sonrisa,

eras alma, cabellos, anhelos de grandeza,

eras mis pies saltando desde la cornisa.

Eras brazos sujetándome, levantándome la cabeza,

eras el tiempo movido por la brisa,

entre trazas fugaces, solo eras tú contra la tristeza.


Vuelvo la vista atrás y ya no queda nada,

el camino a seguir fue todo lo que me dejaste,

borrosa vereda, de ventanas sucias y olvido.

No más dudas, aunque luche contra el viento,

aunque camine solo, entre edificios y aullidos,

no me ahogaré otra vez entre lágrimas y lamentos.

No hay comentarios: